Barcelona, ¿el mejor de todos los tiempos?


Por Cthulhu.


Notable gesto: Abidal con la cinta de capitán levanta la 'Orejona'.


Barcelona volvió a demostrar que practica el mejor fútbol del mundo, ganándole con autoridad a un Manchester United que no supo contrarrestar la jerarquía individual y colectiva de un antagonista muy superior. Teniendo claro esto, me atrevo a preguntar: ¿Estamos ante el mejor equipo de la historia?

Desde el Real Madrid de los años 50 con Di Stefano a la cabeza, hasta el Milan de Gullit, Van Basten y Rijkaard  podían ser elegidos como el mejor conjunto de todos los tiempos.


Tres cracks. Van Basten, Rijkaard y Gullit.

Si recordamos aquel Madrid, debemos recalcar que ganó 8 ligas (1955, 1956, 1958, 1959, 1960, 1961, 1962 y 1964), 5 copas europeas consecutivas (1955 a 1960), 1 Copa Intercontinental (1960), 1 Copa del Rey y 2 Copas Latinas (1955 y 1957). Por su parte, el Milan dirigido por Arrigo Sacchi y Fabio Capello, entre 1988 y 1994 se hizo de 4 scudettos, uno de ellos invicto y 3 Copas de Europa (1989,90 y 1994). Mucho fútbol de primer nivel sin duda.





Tampoco podemos dejar de lado a grandes equipos sudamericanos como el River Plate de los años 40, conocido como “La Máquina” o el fútbol trasgresor que practicó el Sao Paulo de los años 90 con Cafú y Raí. La mística creada por el Peñarol en la década del 60. Como olvidar al Independiente de principios de los 70 con Bochini manejando los hilos de ese equipazo.

"La Máquina"

¿Y el Ajax de principio de los 70’s? Pues también podría entrar al podio, pero en esencia es el Barcelona de Guardiola el que ha perfeccionado la idea de juego del equipo que dirigió Rinus Michels (padre del "Fútbol Total"). Esa transición del ‘pressing’ a la rotación del balón y el juego a un toque. La marca inteligente tiene diversas vertientes.

Es lógico preguntarse cómo Barcelona encontró en su juego un nivel extraordinario y aparentemente inalcanzable para cualquiera.  No obstante, quien redacta sostiene la teoría de que esta versión es producto de muchísimas filosofías de fútbol combinadas con mucho criterioSi hacemos algo de memoria y nos remontamos unos años atrás, vemos que en el Barcelona de Rijkaard la formación era muy similar a la actual, pero con otros nombres obviamente. Un clásico 4-3-3 por defecto.

Hay quienes afirman que el fútbol que practicó el Brasil del 70 es lo más cercano a este Barcelona, sustentando que éste lo convirtió en moderno dadas las necesidades del fútbol actual. Podría ser, pero es demasiado arriesgado hacer este tipo de comparativas. El club catalán hoy por hoy cuenta con jugadores que tienen una condición atlética notable. No es solo tocar, es correr y explotar la velocidad por los costados.




Aquí es donde quiero hacer hincapié en que Guardiola coincide mucho con la concepción estratégica de Louis Van Gaal.


"El modelo ajeno que más me gusta el es Ajax de Louis Van Gaal, o sea un equipo con flexibilidad para componer sus líneas de acuerdo a las exigencias del planteo del rival, en el momento de la recuperación. Además, a mí me interesa que el equipo tengo un proyecto propioe independiente en ofensiva."

“La displina en las posiciones. La posesión de la pelota como idea básica. El juego de apoyo constantes. El movimiento a dos toques... Y lo hacían todo de una manera tan sencilla como sublime. Eran capaces de hacer a la perfección todo lo que yo creo que debe intentar un equipo de fútbol. Hay otras formas de lograrlo pero a mi, me gustaba y me gusta, aquel modo con el que el Ajax de Van Gaal daba lecciones de fútbol al más pintado."


Posesión, táctica y estrategia. Decisiones en el campo bajo la administración de Xavi,  con un Iniesta que maneja lo tiempos y tres fuera de serie arriba. Laterales con resto físico, ductilidad e inteligencia para sumarse al ataque. Backs con rápidez y solvencia tanto en la recuperación de la pelota, como en la salida. Un arquero, cuestionado, pero a la altura de las circunstancias.  El trabajo silencioso de los “obreros” en la marca, y con una banca de suplentes con gente joven combinada con jugadores de experiencia. Todo suma, nada resta.








Es inobjetable lo que Barcelona logró ayer con una propuesta que reafirma conceptos e invita a la reflexión. Un equipo que tiene como mérito principal el hecho que su público aplauda cuando toca para atrás el balón. Eso, en cualquier cancha del mundo es motivo pifia. El público catalán (y del mundo) se ha vuelto tolerante ante el retorno de pelota. Por encima de los títulos, este -para mí- es el gran logro de Pep  y sus dirigidos. Constituir a un público paciente, tolerante y compresivo. Todo esto es adverso a un fútbol más urgente, donde si no ganas no eres nada. Acá se gana y se disfruta, no se pervierte con el exitismo.

"No creo que valga la pena vivir para ganar" - Eduardo Galeano.