Por El Chull
Nunca antes el fútbol está hacienda tan justo como ahora y pondrá en una final, si no ocurre nada raro, a los dos mejores equipos del campeonato. Ya basta de dejarse llevar por la pasión, el fanatismo o el odio de los que no acepta una final entre el Manchester y el Barcelona. Ambos son, hoy en día, los mejores equipos del mundo. Es verdad, aún falta los partidos de vuelta. Noventa minutos donde podrían ocurrir demasiadas cosas. Pero, por el momento, estos equipos tienen bien merecido su pase a la final de la ‘Champions’ en Wembley.
Que no haya dudas que ambos equipos han sido de lo mejor en esta temporada 2010-11 que finaliza. En Inglaterra, a falta de 4 fechas, los ‘red devils’ lideran la Premier, 6 puntos más arriba sobre el Chelsea. Mientras que en la Liga Española, el Barza, a falta de 5 jornadas, mantiene una ventaja sobre el Madrid de 8 puntos. Es decir, tendría que ocurrir una catástrofe para que ambos equipos no terminen como campeones.
Desde hace ya varios años, el Barza y el Manchester vienen siendo constantes animadores de la competición llegando a instancias finales en repetidas ocasiones. Ambos equipos han estado en 4 de las últimas 5 semifinales de la Champions. El año pasado los ‘reds’ se quedaron en Cuartos a manos de Bayern. Mientas que el Barza se quedó en Octavos tras perder con el Liverpool en la temporada 2006-07.
Ambos equipos tienen a Rooney y a Messi. Tener a jugadores de ese calibre es sinónimo de gol, eficacia, empuje. Tener a Cristiano Ronaldo, al margen de asegurarte unos cuantos millones en el banco (?), hoy, no significa mucho. Y tener a Raúl es tener a nadie, si el equipo atrás no rinde.
Rooney encontró en el Chícharito a su socio ideal. |
Tras un inicio ‘flojo’ de temporada, el Manchester cada vez se fue asentando y poniéndose más sólido. El equipo de Ferguson es hoy en día el equipo más equilibrado del mundo: con una defensa estable, un mediocampo excelente y delanteros que están pasando un gran nivel (Chicharito ha mejorado su rendimiento considerablemente desde que llegó).
El Barcelona es más de lo mismo hace ya tres años. Posesión del balón, presión constante y juego vistoso, ofensivo y contundente. El único que le pudo hacer frente fue Mourinho el año pasado con el Inter. Hoy, se podría decir que no ocurrirá lo mismo.
Faltan los partidos de vuelta. El Manchester y Barcelona jugarán con la presión del equipo rival. Da la sensación de que ni el Madrid ni el Schalke tienen con qué buscar la hazaña. Tendría que ocurrir algo extraordinario para que ambos equipos no se encuentren en la final.
Messi, hoy, luego de computarse Maradona una vez más. |
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