Ley de Zoociedades Anónimas, parte II

Por Jonás

Pasada la fecha doble de clasificatorias, sin indulto (?) y con los músicos peruanos llorando como bebitas pidiendo oportunidades, llegó el momento de termear con la ley de sociedades anónimas que debatió el Congreso de la República. La cosa no es tan difícil, pero pinta feo. Aquí un texto didáctico, apto para toda la familia.

¡Indúltame el fútbol, presi! (?)

Fue largo y duro, así como lo lees, el debate que sostuvieron nuestros carismáticos legisladores. Una vez más, muchas opiniones y no se entendía nada. No sólo no entienden de fútbol, la mayoría de congresistas, sino que además no parecen entender nada de la vida. La mayoría empleó su tiempo en atacar al deporte rey, ensuciar el tema con palabras llenas de aparente resentimiento y no aportar absolutamente nada al debate en cuestión. Pasa que estos muchachos no escucharon cuando D10S predicó: “La pelota no se mancha”. No queremos dar nombres. Leyla Chihuán

El único que fiel a su convicción y entendido en el tema desde todos sus ángulos, Alberto Beingolea, ha recibido críticas, insultos y desaprobación de parte de las diferentes hinchadas y la verdad no se entiende. Es el único que peleó a favor de los clubes y además, creemos que ganó. Es tan sencillo,  que los clubes hoy tienen la oportunidad de presentar un plan de reestructuración, que es lo que defendió el burbujito, incluso lo explica en este audio y no lo que pidió la mayoría de congresistas, es decir acabar con el tema, vendiendo todo, saldando deudas y obligando a la conversión a sociedad anónima.

¿Cómo quedó la cosa? Bueno, pues, los clubes tienen una nueva y buena oportunidad. Todo está en manos de las Administradoras Temporales, temporalmente, claro (?). Y es que deben presentar un plan de reestructuración a la junta de acreedores, que son aquellos quienes están perjudicados por el no cumplimiento de pagos de cada club. Vale decir para los burros que cada club tiene una junta de acreedores diferente o propia. Entonces, el encargo inminente de cada Administración Temporal es plantear un plan viable, por sobre todas las cosas, que demuestre o al menos convenza a los acreedores, que los clubes podrán cancelar sus deudas y ser sostenibles en el tiempo, sin la necesidad de transformarse en sociedad anónima. Si la junta no acepta este planteamiento, las administraciones tendrán 60 días para modificar lo presentado, adecuándolo a la necesidad y pedido de los acreedores. Si esto no resulta, los clubes sí serán obligados a convertirse en sociedad anónima. ¿Y qué querías pues, gil?

Los clubes e hinchas, muchos con algún argumento, la mayoría sin entender un carajo nada, se oponen a ser sociedad anónima. La verdad es que la ley no debería obligar a que el club cambie su naturaleza, debería ser, en todo caso, una decisión de cada institución. Igual, no debería descartarse si es una alternativa para tener un club competitivo, en caso así lo decidan sus socios y dirigentes. Lo ideal sería la creación de una figura jurídica adecuada específicamente para entidades deportivas, que se ocupe de gestionar y fiscalizar la parte empresarial o administrativa y también la deportiva.

Insisto con lo que dije en Ley de Zoociedades Anónimas parte I, los clubes deudores son los que mayor potencial tienen para salir del mal momento. Los dos más grandes del país, U y AL, con más hinchadas y por ende posibilidades de potenciar una marca. Los otros tres, Melgar, Cienciano y Boys, son de las regiones con mayor sentido de pertenencia en el país. Es momento de buscar referentes y modelos y expertos en marketing deportivo, para optimizar recursos y generar campañas que devuelvan ingresos significativos.

Marketing en su estado más puro

Este momento límite tenemos que asumirlo todos. ¿Dónde estábamos socios e hinchas cuando desfalcaron el club al que juramos amar? Esta situación la permitimos todos. ¿No quieres que tu equipo, por qué acá seguimos pensando en equipo y no club o institución, sea S.A.? Pon de tu parte, pues, chochera. La AT, administración temporal para el imbécil que no entiende, trabaja en un plan de reestructuración, pero seamos realistas, ellos no pierden nada, no tienen interés más allá de lo laboral y finalmente es eso, un trabajo y que probablemente no disfrutan mucho. Es el tiempo de demostrar que estás en las buenas y malas. Aporta, suma, entrega. Acércate a los dirigentes o hazles llegar como puedas, tú idea. No soy ingenuo, sé que no sugiero algo fácil, que las dirigencias son hostiles y no se abren, pero qué queda, hermano, es un momento límite. Es así. Si no te las juegas toda ahora, cuándo. Es un penal en el minuto 93 en la final, que está 0 a 0, del mundial, no seas maricón. Pídela. Tú equipo necesita tus huevos.